A 20 millones de Millas de la Tierra de Nathan Juran.

Pondría la portada española pero por lo visto no hay ninguna en buena calidad.

Una nave espacial que acaba de terminar su investigación en los planetas cercanos a la Tierra, se estrella en la costa de Italia. Solo quedan dos supervivientes. Uno de los pilotos que relatara lo ocurrido, y un huevo de una especie de otro planeta que no tarda en eclosionar. La criatura de una fuerza y ferocidad sin igual comienza a huir por las tierras italianas a medida que crece sin control. Asustado y furioso se convierte en un monstruo de quince metros que amenaza a toda la vida del planeta al ser prácticamente indestructible.

La compre por Ray Harryhausen, eso ya deja ver que era lo que me interesaba de la película. Y no me ha decepcionado un ápice. Es entretenida, tiene buen ritmo, y los pocos defectos que se le pueden sacar son propios de su época. Lo mejor sin duda es el monstruo. Sus movimientos, su textura y el sonido tan lastimero que gime a lo largo de la película lo convierten en un monstruo vivo, en un animal asustado que huye de algo que no entiende. Ya no ves un montón de plastilina que se mueve fotograma a fotograma. Ves un autentico animal que esta aterrado y solo se defiende.

Y en muchos momentos me dejo con la boca abierta, en los momentos más tontos, cuando nuestro héroe intenta obligarlo a entrar en una celda con una lanza, ves la lanza en manos del héroe pero también como el monstruo la agarra. Tiene varios momentos como esos que me dejan con la pregunta de: ¿Cómo narices han logrado eso? Muy logrados. Eso es un punto extra, la bestia esta perfectamente integrada a su entorno.

Muy recomendables para los amantes del genero, aunque el final recuerda demasiado a King Kong y no sé hasta que punto puede ser homenaje o plagio descarado. Aunque me inclinó más por lo primero dado el profundo amor que tenía Harryhausen por la obra del gorila enamorado. A fin de cuentas fue una de sus fuentes de inspiración para dedicarse a ese oficio, y llegó a tener de mentor al encargado de los efectos de dicho clásico, así que para mi queda claro que Harryhausen le esta haciendo una oda a una obra muy importante para el genero.

Obra que espero traer algún día a Otromundo. Me atrae la idea de hacerle un especial con sus secuelas y remakes, incluido el de los setenta, no solo el de Jackson, porque King Kong para mi también significa mucho al igual que para Harryhausen. No tanto, pero yo la veo como una obra maestra del cine, y dado que no puedo hacer A 20 millones de millas de la Tierra para alabarla me conformaré con una entrada.

Para terminar tengo que comentar que me partí de risa cuando empieza a hablar un doctor japones y los dobladores no tuvieron una idea mejor que sustituir todas sus R por L. Desternillante escuchar al pobre doctor en plan chiste. Un poco más y dice Alloz tles delicias.

No tengo mucho más que decir, La película es lo que es. Un producto para el lucimiento de Harryhausen, una escusa barata para poner a un monstruo implacable arrasando todo lo que encontrase. Por eso el resto de campos cumplen y poco más, es entretenida gracias al maestro de la artesanía que tiene detrás, pero no es ni mucho menos una película que haya que ver si o si. En ese aspecto King Kong entraría por derecho propio, o Furia de Titanes (Que en breve hablare de ella y de su remake) o la mítica Jason y los Argonautas (Una de las piezas clave para que Spielberg viera que podía llegar a realizar Parque Jurásico).

El Maestro con su criatura. Muchos veréis que es el Kraken de Furia de Titanes, pero no hay fotos del monstruo de Venus. 

Y en caso de haber visto ya esos dos clásicos, os recomiendo La Isla Misteriosa antes que esta película. Pero, si sois fans del genero de monstruos y del Stop Motion es una visita muy agradable y entretenida y sin duda os hará pasar muy rápido la hora y poco que dura.

En mi caso, me gusto mucho, pero yo soy amante de Harryhausen y me tragó cualquier cosa suya. (Si, esto va por ti, Manu, ya puedes reírte)

A los demás, feliz cacería de bichos.